Tips para ejercitarte en la oficina

El ejercicio es relativamente fácil de integrar en nuestra rutina laboral.

Además, integrar con regularidad el movimiento en nuestra vida cotidiana en la oficina, es un hábito que te conviene cultivar.

Para esto no es necesario hacer acrobacias en el trabajo. Ya que los movimientos simples realizados con regularidad pueden tener un efecto muy positivo.

A continuación te damos algunos consejos para que puedas ejercitarte en la oficina.

Haz pequeñas pausas

En general, es aconsejable hacer pequeñas pausas para moverse tan a menudo como sea posible. Lo ideal sería levantarse al menos tres veces cada hora. Esto ayuda a estimular la circulación y a aliviar la tensión muscular.

Haz algunas tareas de pie

Cuando leas tu correo o llames por teléfono, ponte de pie.

Si tienes móvil, aprovecha a subir y bajar las escaleras mientras haces tus llamadas.

Asimismo, procura hablar con tus colegas personalmente y evita hacer llamadas telefónicas aunque trabajen en un piso diferente.

Si tienes espacio para caminar en tu oficina, intenta usarlo siempre que puedas.

Almuerzos más activos

Aprovecha las pausas largas en el trabajo, como la del almuerzo y ponte en marcha para volver a tu escritorio lleno de energía.

Realiza ejercicios cortos o pequeños estiramientos, que son fáciles de hacer en cualquier lugar y momento.

Paseos cortos

Los paseos cortos alrededor de la manzana donde está ubicada tu oficina, pueden ser útiles y ayudarte a sobrellevar la somnolencia que aparece después de la comida.

Mantén una postura erguida y deja que los brazos se muevan libremente.

Además, no se recomienda caminar tan rápido. Un paseo a mediodía puede estimular la circulación y el metabolismo, así como fortalecer los músculos del sistema músculo-esquelético y el sistema inmunológico.

Es hora de activarte en la oficina y poner en práctica estos consejos para mejorar tu postura y tu salud.