Entrenamiento funcional y sus beneficios

Una de las tendencias deportivas de mayor relevancia en la actualidad es el entrenamiento funcional. Pero, ¿En qué consiste exactamente este plan de entrenamiento físico?

A lo largo de este post estaremos analizando acerca de los objetivos de seguir un plan de entrenamiento funcional. Además, ayudaremos a resolver algunas dudas sobre este tipo de ejercicios, como a quién va dirigido o cómo conviene realizarlos.

¿En qué consiste el entrenamiento funcional?

Es importante entender cómo funciona este plan de entrenamiento físico. Básicamente, se caracteriza por estar diseñado para generar mejoras en la capacidad motriz.

Debido a esto, los ejercicios realizados parten de una metodología específica que resalta la inteligencia del movimiento humano. Gracias a que es un entrenamiento muy completo, involucra ejercicios variados.

Por ejemplo, un plan de entrenamiento funcional puede involucrar caminar, saltar a la cuerda, subir escaleras, hacer levantamientos con peso y otras dinámicas físicas. Otra característica de esta metodología para ponerse en forma, es que involucra entrenamientos personalizados.

¿Cómo se diferencia este entrenamiento de una metodología clásica?

Seguramente te preguntas, ¿Qué hace especial al entrenamiento funcional? Y para esto, es conveniente que sepas qué lo diferencia de un plan de entrenamiento clásico.

Un plan de entrenamiento clásico es diseñado pensando en conseguir unos objetivos finales, como adelgazar o tonificar el cuerpo. Pero en el caso de este modelo de entrenamiento, la meta es la de mejorar la capacidad motora del organismo.

Y en este propósito se van consiguiendo otros beneficios, porque ayuda a fortalecer todos los músculos que intervienen en esta mejora del rendimiento motriz.

En general, un entrenamiento funcional ayuda a mejorar la capacidad física y funcional de una gran variedad de músculos. Ayuda a tener más agilidad, coordinación, equilibrio y sobre todo, fuerza física.

Por otro lado, a diferencia de un entrenamiento clásico, los ejercicios de un entrenamiento funcional no están centralizados en el uso de un solo tipo de maquinaria. En cambio, sugiere la aplicación de algunos ejercicios que se pueden realizar en casa.

La duración en ambos planes de entrenamiento físico también difieren, en el caso de la modalidad clásica la duración es igual o superior a una hora. Mientras que, en la modalidad funcional los entrenamientos duran menos de 60 minutos.

¿Qué beneficios aporta un entrenamiento funcional?

La popularidad de este tipo de entrenamientos está cobrando cada vez más influencia, perfilando como una gran tendencia deportiva. Pero para tener una mejor idea sobre su importancia, conviene analizar sus beneficios.

• Ayuda a mejorar la movilidad muscular, incluso puede ser aplicado en personas que se están recuperando de lesiones (esto bajo supervisión y guía de especialistas).
• Es ideal para que los músculos, articulaciones y huesos puedan ser más fuertes, logrando así la prevención de lesiones.
• Aporta beneficios importantes para la prevención de enfermedades cardiovasculares, además mejora la calidad de este sistema.
• Los avances físicos también son muy percibidos, ayuda a perder de peso y también tonifica músculos.

Entonces, ¿Merece la pena realizar un entrenamiento funcional? Sin duda, es un tipo de entrenamiento muy completo que incluso ofrece beneficios en la salud mental. Además, los ejercicios funcionales ayudan a quemar grasa con gran eficiencia.