Ácido láctico y runners: principales mitos

El ácido láctico es un término que todo runner o deportista que realiza ejercicio de alta intensidad, debe conocer.

Es por eso que a lo largo de este post te contaremos qué es, cómo influye en el rendimiento deportivo, los principales mitos que existen a su alrededor y cómo reducir la cantidad acumulada en el organismo.

¿Qué es el ácido láctico?

El ácido láctico es un compuesto químico, también conocido como lactato, que se produce de forma natural, principalmente en las células musculares y en los glóbulos rojos al realizar ejercicio intenso.

Este se forma cuando el cuerpo descompone carbohidratos para usarlos como energía, cuando los niveles de oxígeno son bajos.

A este proceso se le conoce como metabolismo anaeróbico.

De no ser utilizado o eliminado del organismo, el ácido láctico puede influir negativamente en el rendimiento de los deportistas.

Mitos sobre el ácido láctico

Los principales mitos que existen en torno a este tema son:

Produce quemazón en los músculos

La sensación de fuego en los músculos que muchos atletas experimentan cuando realizan entrenamientos intensos, no es producto del ácido láctico, sino de la generación de energía que se requiere para mantener la intensidad del ejercicio. Es dicha energía la que produce esa sensación de calor.

Causa la aparición de agujetas

Se conoce como agujetas, al dolor muscular que aparece 24 a 72 horas después de haber realizado un ejercicio intenso. Las agujetas producen sensibilidad muscular, pérdida de fuerza y del rango del movimiento.

Antes se creía que el ácido láctico se seguía produciendo incluso después de concluida la actividad física y que esto causaba las agujetas. Sin embargo, diversas investigaciones han demostrado que el ácido láctico empieza a eliminarse una hora después de realizar la actividad física, por lo que no existe una correlación entre este compuesto y el dolor muscular que aparece días más tarde.

Es un producto de deshecho que causa la fatiga muscular

Hoy en día hay suficiente evidencia que indica que el cuerpo reutiliza el lactato como fuente de energía para los músculos. Por lo tanto, en lugar de causar fatiga, ayuda a retrasarla. Se estima que un 75% del ácido láctico se recicla en glucosa y se usa como combustible. a

Formas de eliminar el lactato

Entre los mecanismos para eliminar el ácido láctico del cuerpo y evitar que influya negativamente en el rendimiento deportivo, tenemos:

Entrenamiento: se busca que tu organismo se adapte al entrenamiento y evita que el lactato se acumule en tu cuerpo. O bien, permite que los músculos lo soporten de forma más efectiva. Para esto se debe tener en cuenta el llamado “umbral del lactato”. Este se refiere al punto a partir del cual el lactato se empieza a acumular por encima del nivel del reposo, mientras te ejercitas y a partir del cual puedes empezar a sentir fatiga.

Para mejorar ese umbral, hay que retrasarlo, lo cual se logra por ejemplo, con series cortas.

Alimentación: Otra forma de modificar el exceso de lactato es mediante la alimentación. Se recomienda comer alimentos más alcalinos como frutas, verduras y semillas. Incrementar el consumo de alimentos ricos en magnesio, y beber agua cada 20 minutos y durante el entrenamiento.